El Rincón de Moraga, gastronomía oriental y espíritu palmero

Noelia Martinez/ agosto 27, 2022/ Restaurantes/ 2 comentarios

¿Qué debe tener un restaurante para tener éxito? Sin duda un buen género y una buena cocina. También precios acordes a la calidad del producto y del servicio. Decoración y ubicación también son importantes. ¿Y si juntamos todo? Estamos en El Rincón de Moraga, un restaurante en La Palma con todos los mimbres necesarios para lograr ser uno de los mejores restaurantes de la Isla Bonita.

El Rincón de Moraga, un lugar con mucha historia

La Plaza de Sotomayor es la última plaza de tierra de las Islas Canarias. En este lugar comenzó la historia económica del Valle de Aridane, con el aprovechamiento de las aguas de la Caldera de Taburiente para regar los cañaverales. En invierno, la nobleza palmera solía quedarse en Santa Cruz de La Palma, mientras que en verano estos grandes terratenientes residían en el Llano de Argual. Sus plantaciones de caña se encontraban alrededor de la Plaza de Sotomayor, y allí construyeron sus casonas, en cuyas dependencias adyacentes vivían los sirvientes.

El Rincón de Moraga ocupa las cuadras de una de estas antiguas casas canarias, construida en el siglo XVIII, justo enfrente del Espacio Prunus, otro lugar muy recomendable de La Palma. Hoy día la antigua aristocracia palmera no habita las casonas de la Plaza de Sotomayor, pero en El Rincón de Moraga puedes comer cómo una auténtica señora. El restaurante se divide en varios ambientes, decorados con toques modernos, entre los que destaca su confortable patio-terraza, una auténtica delicia en las noches veraniegas.

Fundado hace más de una década, hoy día está regentado por Miriam Cruz. Después de recorrer el mundo trabajando en una gran compañía, esta emprendedora palmera decidió volver a la Isla Bonita con la mente llena de proyectos. Entre estos proyectos no estaba El Rincón de Moraga, pero cómo se suele decir “lo mejor de la vida no se planea, simplemente sucede”. Y eso sucedió, que en una isla dónde los restaurantes suelen ser gestionados por los propios chefs, ella aplicó sus conocimientos e instinto para llevar El Rincón de Moraga a otro nivel. En él, innovación y tradición combinan a la perfección en una excepcional fusión de cocina internacional y producto local.

Cocina creativa con producto local y un toque oriental

En una isla dominada por la cocina a la brasa, quizás por su naturaleza volcánica, El Rincón de Moraga supone un soplo de aire fresco dentro de la gastronomía local, sobre todo por sus guiños a la cocina oriental. A pesar de ello, sigue demostrando un gran amor por el producto local y la cocina de mercado, como demuestra la existencia de su menú degustación La Palma.

Debido a lo común que son tanto la celiaquía como la intolerancia a la lactosa, han hecho un esfuerzo para que la mayoría de platos de su carta no lleven ni gluten ni lácteos. Además, previo aviso al reservar, adaptan la mayoría de sus platos a alergias y/o intolerancias.

Nosotros probamos su menú degustación, del que destacaría el carpaccio de pulpo con espuma de queso y helado de aguacate. Una auténtica delicia. Otro de los platos que me sorprendió fue la crema de millo, emulsión de queso ahumado de La Palma y langostino curado en sal. Aunque no soy muy aficionada al millo, el resultado estaba exquisito.

En cuanto al maridaje, hecho con vinos locales, me sorprendió gratamente el O’Daly “Fuego”, una edición limitada de 1.500 botellas de la Bodega Castro & Magán. ¿Y qué tiene de especial? Su gusto y aroma ahumado 😱. Las uvas provienen de una parcela afectada por el incendio de 2020. Aunque es un vino excepcional, espero que nunca tengan que hacerlo de nuevo.